Un sueño

A veces me gusta ir al pasado, durante mi infancia fui realmente feliz, tenía todo lo que deseaba. Y mis recuerdos son maravillosos. Pensaréis que es típico pensar que tiempos pasados siempre fueron mejores y no, no es cierto. A partir de mis 12 años todo se va volviendo más oscuro, hasta perder a uno de mis referentes y mi gran apoyo, mi padre.

Pero antes de eso, mis recuerdos me llenan de sentimientos felices y perfectos. Y en esos recuerdos de niña tengo un deseo, ser mamá. Quienes me seguís sabéis que ha sido mi mayor sueño toda mi vida. Y hoy, a las 7 de la mañana miro hacia mi izquierda y veo a mi chico durmiendo y a una cosita pequeñita durmiendo en medio de los dos. Y siento felicidad, una felicidad diferente porque en ella se mezclan muchos más sentimientos, incredulidad por haberlo conseguido, miedo porque le pueda pasar algo, incertidumbre de qué pasará a partir de ahora, tristeza, sí leéis bien. Mi niño ha llegado en plena pandemia mundial, por un virus peligroso, y por eso nadie de mi familia o la familia de mi ha podido tocarlo todavía. Mi madre y mis hermanos saben por todo lo que he pasado y lo que he luchado, y deseaban disfrutarlo desde el minuto cero. Pero no ha sido así, lo conocen por fotos y videos, y mi madre a veces le saltan las lagrimas por telefeno cuando hablamos porque quiere abrazarlo y besarlo y a mi se me parte el alma.

Llegará mamá el momento en que puedas achucharlo y entonces quizá me salten a mi las lágrimas de veros.

Incredulidad porque pasé de verme con una barrigota a despertar y darme a un pequeñito en brazos. Aquí os hace falta más información para entenderme, y es como fue el nacimiento de R. en cuanto pueda os lo cuento en otro post.

Aquí al lado alguien empieza a hacer ruiditos de hambre, que avisan que me queda poco tiempo para seguir escribiendo.

No me canso de mirarlo, «esta cosita es mía, estuvo en mi barriga y ahora está a mi lado». Para nosotros es perfecto, es guapísimo y algo llorica también 😉 mi chico dice que estamos enamorados de él, y es verdad.

Termino con un deseo, un deseo para que este sueño cumplido llegue a muchas familias, a muchas mamás y papás que los están esperando con mucho amor. A ti que me lees con una sonrisa o alguna lagrimilla, no desesperes, llegará tu sueño 😘